También les refirió una parábola, diciendo: La heredad de un hombre rico había producido mucho. Y él pensaba dentro de sí, diciendo: ¿Qué haré, porque no tengo dónde guardar mis frutos? Y dijo: Esto haré: derribaré mis graneros, y los edificaré mayores, y allí guardaré todos mis frutos y mis bienes; y diré a mi alma: Alma, muchos bienes tienes guardados para muchos años; repósate, come, bebe, regocíjate.Pero Dios le dijo: Necio, esta noche vienen a pedirte tu alma; y lo que has provisto, ¿de quién será? Así es el que hace para sí tesoro, y no es rico para con Dios. Lucas 12:16-20
Esta es la triste realidad del mundo en que vivimos hoy.
Se está olvidando lo principal.
Pues en el afán de hacerse rico, famoso, reconocido, tener autoridad….
Uno encuentra tiempo para estar con los amigos, tiempo para el trabajo, tiempo “para disfrutar la vida”, tiempo para compras, tiempo para las fiestas, etc.
Más se olvida que un día todo esto se va acabar, pues del polvo salimos y para ya volveremos.
La única cosa que permanece es nuestra alma, que es eterna.
Según la biblia hay dos caminos, la vida eterna con El Señor Jesús ó el lago que arde con fuego y azufre donde será echado satanás, el infierno y sus Angeles.
Y pregunto ¿Para donde irá su alma?
¿Será que hemos cuidado de ella, como deberíamos cuidar?
¿Somos necios ó prudentes?
Pero Dios le dijo: Necio, esta noche vienen a pedirte tu alma; y lo que has provisto, ¿de quién será?
Piense, medite y seamos inteligentes.