RECOMPENSA DE LA ENVIDIA

Porque donde hay celos y ambición personal, allí hay confusión y toda cosa mala. Santiago 3:16. NBLH

¿Alguna vez has visto a una persona envidiosa vencer en la vida?
¿Alguna vez has visto a una persona egoísta tener éxito?

¡Claro que no!
Tal persona puede incluso alcanzar la prosperidad financiera, lo que no significa éxito.

El éxito es tener paz, ser feliz, formar una familia, tener comunión con Dios, poner la cabeza en la almohada y dormir tranquilo.

Lamentablemente este tipo de persona nunca lo tendrá.

Porque como dice la Biblia, tal persona siempre estará en problemas.
Este es el ambiente en el que vive.
Ella no recoge nada más que lo que siembra.

¿Qué tenemos que hacer?
En primer lugar, no se unan con este tipo de personas.
En segundo lugar, oren por ellos, para que estas personas realmente conozcan al Señor Jesús.

Y por supuesto, si alguna vez sentimos un sentimiento como este, reprendemos en el nombre del Señor Jesús, porque sabemos que ese sentimiento, su raíz proviene del mal.

Que siempre seamos altruistas ​​y misericordiosos, porque de esta manera obtendremos la bendición de Dios.