El que encubre sus pecados no prosperará; Mas el que los confiesa y se aparta alcanzará misericordia. Proverbios 28:13
Sabemos que tenemos un enemigo y nuestro enemigo trabaja las 24 horas del día para que caigamos en pecado.
El pecado lleva a la ruina, a la destrucción, pero el gran problema del pecado no es solo ser seducido por él.
El gran error del pecado es no confesar, no buscar ayuda, no buscar la misericordia del Dios todopoderoso.
¿Cuántas personas hoy están caídas espiritualmente y postradas?
Personas que un día fueron utilizadas por el Espíritu Santo, pero su gran error fue y sigue siendo guardar el pecado para sí mismas.
Hay miembros, obreros, pastores, obispos, diáconos, ancianos, muchas personas dentro de la iglesia que cubren sus pecados.
Pero no debemos olvidar que el pecado es como una tarjeta de crédito, disfrute ahora, pero un día llega la factura y tendrá que pagarla.
Por esta razón vemos muchos cristianos deprimidos, enfermos, tristes, amargados, infelices, matrimonios destruidos, familias arruinadas, todo por una simple razón, estas personas llevan dentro de sí un pecado y no confiesan.
Pastor Daniel, ¿cuál sería la solución?
¡La Biblia nos enseña y deja muy claro que quien confiesa y abandona el pecado alcanzará la misericordia de Dios!
Mientras esta persona no confiese, está en deuda con el diablo, con el acusador, y es vulnerable a seguir practicando el pecado.
Por eso mi hermano y mi hermana cuidado, abra sus ojos, no jueguen con su salvación.
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