Naamán,
general del ejército del rey de Siria, era varón grande delante de su señor, y
lo tenía en alta estima, porque por medio de él había dado El Señor salvación a
Siria. Era este hombre valeroso en extremo, pero leproso. 2 Reis 5:1
La Biblia es muy linda y interesante.
Este versículo empieza a exaltar a Naamán mostrando lo importante que era en Siria.
Pero termina diciendo él era leproso.
Sabemos la historia, Naamán para ser sanado tuvo que usar la fe en el Dios todopoderoso.
Y de esta forma el milagro sucedió.
Esto nos deja algo bien claro, la persona puede ser rica, famosa, hermosa, inteligente, pero sin Dios no es absolutamente nada.
¿Cuántas historias has visto y oído de personas famosas, ricas inteligentes que se suicidaron, que murieron de sobredosis, y mucha veces preguntamos por qué?
La respuesta es muy simple, podemos tener todo, pero sin Dios no tenemos nada.
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