Había una vez un rey sabio y bueno que ya se encontraba al final de la vida.
Un día, presintió la llegada de la muerte, llamó a su
único hijo, que lo sucedería en el trono, sacó del dedo un anillo y lo dio a él
diciendo:
- Mi hijo, cuando seas rey, lleva siempre contigo este anillo.
En él hay una inscripción.
Cuando vives situaciones extremas de gloria o de dolor, retira y lee lo que hay en él.
Y el rey murió, y su hijo pasó a reinar en su lugar, siempre usando el anillo que el padre le había dejado.
Pasado algún tiempo, surgieron conflictos con un reino vecino que culminaron en una terrible guerra.
Al frente de su ejército, el joven rey partió para enfrentar al enemigo.
En el auge de la batalla, sus compañeros luchaban bravamente; muertos, heridos, tristeza, dolor, y el rey se acuerda entonces del anillo.
lo quita del dedo y lee la inscripción:
- Mi hijo, cuando seas rey, lleva siempre contigo este anillo.
En él hay una inscripción.
Cuando vives situaciones extremas de gloria o de dolor, retira y lee lo que hay en él.
Y el rey murió, y su hijo pasó a reinar en su lugar, siempre usando el anillo que el padre le había dejado.
Pasado algún tiempo, surgieron conflictos con un reino vecino que culminaron en una terrible guerra.
Al frente de su ejército, el joven rey partió para enfrentar al enemigo.
En el auge de la batalla, sus compañeros luchaban bravamente; muertos, heridos, tristeza, dolor, y el rey se acuerda entonces del anillo.
lo quita del dedo y lee la inscripción:
"Esto también pasará".
Y él continuó en la lucha.
Perdió batallas, venció otras tantas, pero al final se salió victorioso.
Vuelve, entonces, a su reino y, cubierto de gloria, entra en triunfo en la ciudad.
Y él continuó en la lucha.
Perdió batallas, venció otras tantas, pero al final se salió victorioso.
Vuelve, entonces, a su reino y, cubierto de gloria, entra en triunfo en la ciudad.
El pueblo lo aclamó.
Lo llama de héroe.
En este momento se acuerda de su viejo y sabio padre.
Quita del dedo el anillo y lee:
"Esto también pasará".
Este cuento nos deja una bonita lección.
En esta vida todo es pasajero, pero nunca se olvide en las victorias o en las guerras Dios siempre estará a su lado.
Todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora.
Lo llama de héroe.
En este momento se acuerda de su viejo y sabio padre.
Quita del dedo el anillo y lee:
"Esto también pasará".
Este cuento nos deja una bonita lección.
En esta vida todo es pasajero, pero nunca se olvide en las victorias o en las guerras Dios siempre estará a su lado.
Todo tiene su tiempo, y todo lo que se quiere debajo del cielo tiene su hora.
Tiempo de nacer, y tiempo
de morir; tiempo de plantar, y tiempo de arrancar lo plantado; Eclesiastés 3: 1-2
No hay comentarios:
Publicar un comentario