Todo lo que hagan, háganlo de corazón, como para el Señor y no para los
hombres, sabiendo que del Señor recibirán la recompensa de la herencia. Es a
Cristo el Señor a quien sirven. Colosenses 3:23-24
Este mensaje del Señor Jesús nunca ha sido más actual.
Porque vivimos en la era de las redes sociales, donde lamentablemente la gente
hace todo lo posible para lucir como algo.
Vemos a través de las redes sociales que la gente incluso hace obras de
caridad, hermosos actos con una sola intención.
¡Aparentar a los demás!
Y esta actitud ciertamente no agrada a nuestro Señor Jesús.
Por eso la palabra de Dios deja muy claro que todo cuando venimos a hacerlo
debe hacerse con la intención de agradar a Dios.
Y debe hacerse con todo nuestro corazón.
Ya sea en casa, en el trabajo, en la escuela, entre amigos, en tu comunidad,
donde sea que estés, todas las actitudes que vengamos a tomar deben ser
pensadas con un solo objetivo, glorificar el nombre del Señor Jesús, agradar a
Dios.
Hacerlo no solo como una obligación, sino hacerlo con todo el corazón.
Cuando pensamos y actuamos de esta manera somos muy bendecidos.
Dios promete que dará una recompensa, un premio a aquellos que solo se
preocupan por complacerlo.
Pueblo de Dios, escucha este mensaje.
Pon esto en práctica, toma acciones que agraden a nuestro Dios, porque así tu
vida económica, familiar, de salud será bendecida por Él.
Porque todo lo que hagas será para Él.
Y lo más importante, su nombre estará escrito en el libro de la vida.
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